El camarero parlanchín

El camarero parlanchín

jueves, 16 de enero de 2014

Nuestras profesiones.

El otro día vi en internet una de esas fotos graciosas que circulan a miles por la red. 
Era una pizarra de cualquier bar o cafetería en la que decía....tooodas las cosas que te daban (o que tenías) por el precio de un café. 
Cuento ésto porque quiero escribir sobre la cantidad de "profesiones" o empleos que puede (y debe) desarrollar un buen camarero.
En la nómina pondrá.....AYUDANTE DE CAMARERO, o con un poco de suerte CAMARERO. Pero nunca cobrará por todo lo demás. 
Será un intermediario con la prensa (ojito con la prensa. Merece un capítulo aparte que tendrá). 
-Cafetín y La Nueva España guaje. 
-¿Cómo quiere el café señor?
-No importa, La Nueva España. 
La prioridad es el periódico. El café valdría hasta un decafeinado. 
Si el señor no encuentra los números de la primitiva igual hasta vemos al camarero pasando páginas para ver si tiene cinco y el complementario. 
Estanco. También somos un estanco. En este caso, el  negocio gana un dinero con la venta, pero no deja de ser trabajar en un sector que ....no es el nuestro. ¿Qué es normal vender tabaco en un bar? Si, lo sé. Sólo intento explicar que no está remunerado, y que se da por hecho que tenemos que hacer bien un trabajo que no es el nuestro. 
Cuando pasa el verano empezamos a ver lotería de Navidad por todos laos. En este caso la ganancia es nula. Es una atención (o servicio) hacia los clientes. Es una manera de decir....."comparto con mis clientes la ilusión de repartir un dinero si nos toca". Perfecto. ¿Dije ganancia nula? Miento. Si no se gana nada....es el mejor de los casos. Si, por lo que sea, falta dinero en la caja de la lotería, la pérdida la asume el bar. Bueno, igual hay alguna excepción, pero lo que yo conozco....es así. 
Y si hablamos de cantidades importantes, es relativamente normal cualquier error. 
-¿Me da un décimo pa Navidad?
-Aquí tiene.
-Uy....no. ¿No tiene uno que termine en 56?
-Pues.....no. Es el que tenemos. Es nuestro número. 
-Ya, es que no me gusta. 
Ya señora, pero es que la administración de lotería queda dos calles más abajo. Si no le gusta lo deja y punto. 
Frase que no se le puede decir a la clienta, claro. Si lo haces.....
-¡Qué desagradable! 
-Pero señora......
-Que si, que es un desagradable. 
En fin.......
Cuando el día avanza y el alcohol empieza a aparecer por la barra de un bar, surge la figura del psicólogo. Ese camarero que escucha toooodas tus penas, toooodos tus proyectos, y al que seguro se le acaba pidiendo consejo sobre cualquier cosa. 
-En el trabajo me putean. ¿Crees que debería mandarlo a la mierda?
-Hombre, pues no sé, tal y como está la cosa....
-Ya, pero es que no lo soporto más. ¿No crees que debería mandarlo a tomar po'l culo?
-Bueno, hoy no hay mucho donde elegir, así que yo creo que igual deberías aguantar, porque......
-¿Qué me estás diciendo? ¿Qué es cosa mía? ¿Qué me quejo por gusto? Pues sabes qué te digo? Que no tienes ni p.....idea. Que no sabes lo que es trabajar de verdad (mítico). Y que hasta luego. 
-Perdona....la cervecina.
-Apúntala. 
Y cliente enfadado. Y cerveza sin cobrar. Y encima te han dicho que no tienes ni idea de lo que es trabajar. Pues eso......
Llamar por teléfono a un pariente porque no sabe como va el móvil.....guardar los recaos mientras se va a hacer otro.....cambiar un billete por si el taxista no tiene cambio (nunca entendí que yo tenga que tener cambio y un taxista, peluquero, frutería o cualquiera no). Prestar dinero (mucho cuidado con eso. Puede convertirse en una donación).....guardar el periódico para llevarlo mañana....recortar el cupón que trae para conseguir una camiseta de la selección de Azerbayán......y muchas más cosas que nos pueden pedir. 
Supongo (dije supongo) que en las escuelas de Hostelería no les enseñan todas estas cosas. O, como mínimo, no les advierten de que cualquiera de esos ejemplos les pasarán si......o si. 

1 comentario:

  1. Tu blog es todo un descubrimiento. Es divertido y real. Todos podemos sentirnos identificados en alguna de las situaciones que describes.
    No soy fumadora y tampoco trabajo en hostelería pero no hay cosa que más me ofenda que escuchar a una persona pedirle a un camarero que le saque tabaco. ¿Acaso le pide el camarero que se haga ella misma el café? No sé, me parece una completa incongruencia. Supongo que, como clientes, abusamos de profesionales que no tienen porque extralimitarse en sus funciones.
    Espero la próxima entrega de tus aventuras

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